sábado, 5 de septiembre de 2009

ARGENTINA 1963: METERSE CON LOS MONOPOLIOS. CUALQUIER PARECIDO CON LA REALIDAD NO ES COINCIDENCIA SINO CAUSALIDAD


José Antonio Aranda y Héctor Magneto.

Históricamente hacerle frente a los monopolios ha sido tarea difícil, costosa.
Para los desmemoriados o para los que no saben algunas partes de la historia (o para aquellos a quienes les contaron la historia lavada de pueblo)va esta que no es coincidencia.
Año 1963. Un presidente radical oriundo de la provincia de Córdoba, llegó al gobierno con el 25% de los votos válidos en una elección en la que el voto en blanco alcanzó casi el 20% y el peronismo siguió prohibido, y donde también hubo un partido político (UDELPA) que llevó como candidato al gral. Pedro Eugenio Aramburu (ese mismo que "dormía la siesta" y no atendió a la esposa del gral. Valle que iba a pedir por su esposo que, finalmente, fue fusilado en 1956).
Ese presidente era Arturo Illia y no contaba con mayoría en el Congreso. Tal vez si hubiera contado con otro Congreso hubiera podido hacer frente con diferente resultado su política anti monopolios.
Illia anuló contratos petroleros que otro presidente radical (Frondizi) había firmado con empresas multinacionales y que perjudicaban profundamente al país a través de YPF.
Además, fue su ministro Oñativia quien impulsó una ley sobre medicamentos que recortaba el enorme poder de laboratorios multinacionales (otro monopolio).
Al gobierno de Illia lo acosaron los empresarios monopolistas, los banqueros y los productores rurales quienes chocaron con él a través de la Sociedad Rural y la Unión Industrial unidas en una asociación antiestatal llamada ACIEL (Acción Coordinada de las Institutos Empresarias Libres). Ambas entidades atacaron persistentemente la inclinación del gobierno por los controles de precios y de cambio, su proteccionismo a las empresas públicas como YPF y la decisión de mantener congelados los arrendamientos agrícolas. Los hombres de negocios tomaban las leyes sociales como subversivas, decían que la Ley del Salario Mínimo Vital y Móvil era un atentado contra la Nación. Se produjo un boicot de los empresarios hacia el gobierno.
Año 2009: Extraña (o no tanto) paradoja radical.
De lo que le ocurrió a Illia se olvidan o (porque es imposible pensar que lo IGNORAN la diputada Giúdice, el senador Gerardo Morales, la desocupada Carrió (o mejor dicho la ocupada en buscar motivos para denunciar).
Justamente esta última hizo unas clarísimas declaraciones a través de las cuales se posicionó al lado del monopolio, dejando en evidencia su vinculación con el monopolio informativo en momentos en que el gobierno de Cristina Fernández da un paso trascendental presentando el proyecto de ley de medios audiovisuales que intenta romper con el monopolio de la información.

¿Cipayismo mediático, sumisión al poderoso, tradición de traidores, mercenarios del monopolio o gorilismo entrañable?... tal vez todo eso junto, por eso hoy lo defienden.
Son, sin lugar a dudas, los empleados del mes.

2 comentarios:

GUI dijo...

Y, como nadie hace nada, algo habrá que hacer... Por lo menos dar las gracias por el post. :)

GRACIAS

Anónimo dijo...

"Los medios tienen que evitar pelearse entre ellos en estos dias". Ja, la misma estrategia que le propuso al agrogarquismo.

Al 90% de los medios le conviene la ley de medios audiovisuales que s está impulsando. Carrió cree que "medios" es Clarín, todo lo de Clarín, Papel Prensa, La Nación (que es mas o menos de Clarín), Perfil, C5N y 26TV. El mundo es mas grande que 10 canales de TV, 10 radios y 5 diarios.